Le dedico un párrafo aparte a este tema por la gran importancia que tiene la boca en una persona, ya que en esta es donde se encuentra un gran porcentaje de los campos de interferencia.
El odontólogo, muy frecuentemente, se convierte en un mecánico de la boca, ignorando que somos un todo y que los dientes hacen parte de ese todo. Las muelas y dientes son estructuras vivas que participan activamente en la dinámica de la persona y por lo tanto pueden ser el origen de problemas de salud y no solo las piezas dentales sino también las cicatrices que quedan después de extracciones o cirugías, muelas del juicio incluidas, raíces que hubieran podido quedar tras extracciones incompletas, reacciones inflamatorias del hueso (osteitis) , amalgamas de mercurio en íntimo contacto con el hueso y la dentina, que todavía muchos odontólogos siguen usando, a pesar de haberse prohibido su uso en varios países de la Unión Europea y USA.
Las amalgamas (color plata), se componen de diversos metales que producen una diferencia de potencial eléctrico que origina el llamado “efecto pila”, por que genera corrientes eléctricas, que oscilan entre 200 y 600 milivoltios. Mucha gente puede sentir directamente estas corrientes, cuando tocan sus amalgamas con la cuchara o el tenedor al comer.